¡Gracias!

Has llegado hasta aquí y lees ahora este blog. Seguramente es porque hoy has estado en la celebración de mi toma de posesión de esta parroquia de la Santa Cruz y has oido la invitación a visitar esta interesante iniciativa.

Pastor y Hermano son las palabras con las que me presenté en la eucaristía del pasado lunes, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. Así deseo seguir viviendo este camino del sacerdocio, del que he recorrido ya casi veinte años.

Si eres de la comunidad parroquial, este blog será un modo de conocernos más y de compartir con mayor intensidad nuestro seguimiento del Señor resucitado.

Si no eres de la parroquia, no pasa nada. Te hago saber que aquí también tienes tu casa, donde tienes abierta la puerta y donde siempre te ofreceremos la mejor acogida.

Si has llegado hasta aquí, navegando por los mares del ciberespacio, felicidades. La Buena Noticia se hace presente desde las nuevas tecnologías.

Estamos en el año sacerdotal, coincidiendo con el 150 aniversario de la muerte del santo cura de Ars, San Juan María Vianney, patrón de todos los párrocos del mundo. Con este blog, pretendo unirme a este acontecimiento eclesial como un servicio concreto a quienes me puedan necesitar.

La fotografía de la cabecera tiene un especial significado. Es la primera eucaristía celebrada en la parroquia de la Santa Cruz, precisamente el pasado lunes, 14 de septiembre, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. La imagen está tomada por Dolly Vallejo quien captó diversas instantáneas de aquel dia. Una fotografía con mucho simbolismo en cuanto que representa para mí el inicio de esta nueva etapa. Junto al altar, detrás se observa la imagen de la Virgen, y es que en el seguimiento del Señor, ella es ejemplo de discipulado.

En este blog, encontrarás al final de la página un espacio donde enviar tus intenciones de oración, que tendremos presente en nuestras celebraciones. No dudes, en hacerlas llegar para que oremos por todo aquello que te preocupa, por tus búsquedas, por tus proyectos...

Por otra parte, te ofrezco mi acompañamiento, mi escucha, mi ayuda. Te tiendo mis manos desde aquí para que el camino de la vida te sea más ligero. Estaré encantado de poderte atender, no solamente en la parroquia, sino también desde aquí en lo que podríamos llamar un despacho parroquial "on line".

Finalmente, te invito a dejar tus comentarios, será una buena manera de estar en contacto y de enriquecernos con tus aportaciones, sugerencias, sentimientos, experiencias...
¿A qué esperas a dejar tu comentario? Lo espero desde ahora mismo. ¡Gracias!

Aquí me tienes, cuenta conmigo como "Pastor y Hermano".