La verdad que el mensaje de la liturgia de este domingo es apasionante. En definitiva, vivir la vida con intensidad, con alegría con deseo de superación...Cada domingo las celebraciones son diferentes y con ellas la posibilidad de transmitir de modo positivo el mensaje del evangelio.
Yo no sé cuánto tiempo viviré, pero sí quiero confesar que deseo vivir con intensidad, aprovechando todas las posibilidades a mi alcance para hacer el bien, para dar lo mejor de mí mismo.Quiero vivir cada día como si fuera el primero y último de mi vida, no soy santo pero hago mi opción por serlo, por seguir cada día con más entusiasmo al Señor. No me considero especial, ni extraordinario, soy como tú. Simplemente, confío en que yo pongo de mi parte lo que puedo y Él lo multiplicará con creces como compruebo en muchas ocasiones. Ojalá, tú que me lees ahora puedas vivir también desde estos deseos.
es maravilloso sentir eso que dices, pero la verdad es que es muy dificil decirlo y mas dificil sentirlo.Las dificultades de la vida,los baches,las preocupaciones ... nos alejan de Dios la mayoría de las veces, en vez de acercarnos a El,de ofrecer esas pequeñas cruces, de vivirlas por El.Ojalá sepamos y aprendamos a vivir el día a día como si fuera el último,dandonos todos a todos igual que Jesús.
ResponderEliminar