La fe no se clausura


La fe es un hermoso regalo recibido desde el día de mi bautismo que no tiene fin, siempre va creciendo y va a más. Es una alegría creer.Mil gracias de corazón a cuantos participaron en la noche de adoración eucarística, clausurando así el año de la fe, en la noche del pasado sábado al domingo. Me siento muy feliz y dichoso, el Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres.Gracias a cuantos oraron por nosotros, desde otros lugares,gracias a quienes prepararon un rato de oración, gracias a cuantos estuvieron en los preparativos, gracias a cuantos se acercaron a orar, un rato, o varias horas, o incluso toda la noche. Todo esto es obra del Señor, no tiene otra explicación.No tengo palabras, todo es gratitud,gozo...Aquí ya ha empezado el lío ( como nos pedía el papa Francisco en Brasil) y esto ya es imparable.Alguna vigilia más y no sé cuántas cosas más que nos esperan, no sé cuáles pero ya se encargará el Espíritu de sugerirlas e indicarlas a través de la vida.Un abrazo fraterno a ti que has formado parte de esta iniciativa con tu presencia o con tu oración, mi plegaria por ti y los tuyos.Pide por mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario